La revisión de valores catastrales por el Ministerio de Hacienda provoca que el 50,5% de los vecinos vayan a pagar menos y el resto más
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La revisión de valores catastrales por el Ministerio de Hacienda para corregir los desajustes entre el valor catastral y el valor real de mercado provoca que el 50,5% de los vecinos vayan a pagar menos en el recibo del IBI de 2024, mientras el resto paga
La revisión de valores catastrales ha obligado al Consistorio a revisar el tipo de gravamen para mantener el nivel de ingresos en la IBI Urbana que en 2024 se verá incrementada en el 2,96%, muy por debajo del 13,4% de incremento que ha sufrido el IPC en estos dos últimos años, llevándose a cabo tan solo una redistribución de los mismos ingresos en función de los nuevos valores catastrales asignados por la Dirección General de Catastro
El 50,5% de los vecinos va a pagar menos: un 36,83% del total pagará entre 0 y 50 euros menos, el 7,13% entre 50 y 100 euros menos, el 3,44% entre 100 y 200, 1,98% entre 200 y 500 un 1,12% pagarán 500 euros menos
Como ejemplos entre los años 2023 y 2024, un inmueble en la calle Lobero pasa de pagar 2.058 a 1.154 euros, en Santa María del Águila hay viviendas que pagan 523€ menos, en Balerma 56€ menos, en Las Norias 248,74€ menos, en San Agustín 193€ menos, en Pampanico 50€ menos, en Matagorda hay bajadas de 258 euros y en Guardias Viejas de 96 euros. Con carácter general en Ejido Centro y núcleos se ha experimentado una bajada, a excepción de Almerimar
El portavoz municipal, José Francisco Rivera, ha explicado que “esta revisión llevada a cabo por el Ministerio provoca que haya una nueva forma de distribuir el importe del padrón de la IBI Urbana en base a los principios de capacidad económica y justicia tributaria, corrigiendo los desequilibrios existentes entre el valor del mercado y el valor catastral de unos inmuebles que no se han revisado en 20 años”
Rivera ha pedido al grupo municipal VOX que “deje de engañar a los ciudadanos con datos irreales sobre el IBI que hacen alusión tan solo al tipo impositivo y no tienen en cuenta el valor catastral”. “El pago medio del recibo del IBI en 2023 en El Ejido fue de 343,02€ mientras que en municipios vecinos con nuestros mismos servicios fue de 339,8€, lo que supone una diferencia de tan solo de 3,23€”
El portavoz del Gobierno municipal y concejal de Hacienda, José Francisco Rivera, ha explicado hoy la actualización de las ordenanzas fiscales reguladoras del Impuesto sobre Bienes Inmuebles y de Recogida de Basura para el ejercicio 2024, que fueron aprobadas en el Pleno celebrado el pasado viernes, obligatorias para cumplir con las exigencias normativas. En el primero de los casos, el Ayuntamiento ha actualizado el tipo de gravamen una vez que la gerencia de Catastro ha revisado los valores catastrales, después de más de 20 años sin hacerlo, adecuando los mismos a la situación real.
“Lo que hace el Ayuntamiento es seguir bajando la presión fiscal, porque ni siquiera se actualizan los valores al IPC, sino bastante por debajo”, ha señalado Rivera. “El Ministerio entiende que había desajustes muy importantes y por eso escoge El Ejido como uno de los municipios a revisar, y lo que se pagaba se distribuye de otra manera, en función de la nueva ponencia de valores catastrales y cuáles entiende el Ministerio que son los valores actuales de mercado de cada inmueble, para que la tributación responda al principio de justicia tributaria y capacidad económica”, ha añadido. “Nuestra línea sigue siendo de contención fiscal, manteniendo la calidad de los servicios, haciendo frente al día a día prácticamente con los mismos ingresos y manteniendo la calidad en los servicios”.
La subida aplicada en la cuota del IBI, con independencia de los nuevos valores catastrales, es del 2,96%, por debajo del 3,8% que resultaba de sumar el aumento del IPC del último año (1,9%) con el asignado para el anterior. La inflación real de estos dos últimos años ha sido del 13,4%, pero se entendió que el IPC de 10,5% del ejercicio anterior no respondía a ninguna bonanza económica, por lo que se optó por aplicar el 1,9% de este ultimo ejercicio al anterior, estableciendo el incremento del padrón en el 3,8% (1,9%+1,9%), evitando una subida desproporcionada de los impuestos debido a un IPC anormal y que era consecuencia de la guerra de Ucrania y la crisis energética global. Finalmente, la subida de la cuota aplicada por el Ayuntamiento, referenciada al IPC de esos dos años, ni siquiera ha sido del 3,8%, sino del 2,96%, “lo que está muy lejos de ese 13,4% de inflación que ha habido en estos dos años, y que no se ha repercutido a los vecinos”, ha recalcado el edil.
“Pese a haber tenido que incrementar el tipo impositivo para garantizar el importe del padrón, algo a lo que nos obliga el Plan de Ajuste en vigor, el 50,5% de los vecinos van a pagar menos”, ha recordado Rivera, quien ha puesto el acento en que “aquellos inmuebles a los que les ha subido el valor catastral, obligatoriamente iban a pagar más”. No debe olvidarse, como ha indicado el portavoz municipal, que “somos un Ayuntamiento catalogado en situación de riesgo financiero y tenemos un Plan de Ajuste que garantiza que podamos cumplir con nuestras obligaciones financieras”.
La modificación de los valores catastrales supone una bajada de los mismos de un 17% de media, pero tal como ha advertido el edil, “no se puede incrementar el tipo de gravamen de forma lineal, sino que ha de calcularse a la nueva base imponible del impuesto”. A lo que está obligado el Ayuntamiento es a que el padrón mantenga su valor nominal con respecto al del año anterior más el IPC, exigidos por el Plan de Ajuste.
De todos los vecinos, ha indicado, “el 36,83% pagará entre 0 y 50 euros menos; el 7,13% entre 50 y 100 menos; el 3,44% entre 100 y 200 menos; el 1,98% entre 200 y 500 euros menos; y 1,12”, más de 500 euros menos”.
El concejal ha puesto distintos ejemplos de calles de los núcleos del municipio, indicando que “un inmueble en la calle Lobero pasa de pagar 2.058 a 1.154 euros, en Santa María del Águila hay viviendas que pagan 523€ menos, en Balerma 56€ menos, en Las Norias 248,74€ menos, en San Agustín 193€ menos, en Pampanico 50€ menos, en Matagorda hay bajadas de 258 euros y en Guardias Viejas de 96 euros. Con carácter general en Ejido Centro y núcleos se ha experimentado una bajada, a excepción de Almerimar”.
Lo que pretende el Ministerio y la dirección general del Catastro con esta revisión, ha sostenido, es “que la tributación sea justa, que se tribute en función de la capacidad económica de cada cual, y el Ayuntamiento sigue ingresando lo mismo, simplemente se actualiza al IPC y en nuestro caso incluso por debajo; el padrón dice dónde están las injusticias, los desequilibrios, así que el dinero es el mismo, pero la carga se redistribuye de otra forma en función del valor de mercado actual asignado a de cada inmueble”.
Por su parte, Rivera ha pedido al grupo municipal VOX que “deje de engañar a los ciudadanos con datos irreales sobre el IBI que hacen alusión tan solo al tipo impositivo y no tienen en cuenta el valor catastral”. “El pago medio del recibo del IBI en 2023 en El Ejido fue de 343,02€ mientras que en municipios vecinos con nuestros mismos servicios fue de 339,8€, lo que supone una diferencia de tan solo de 3,23€”
Nuevo impuesto estatal a la recogida de basura
En el caso de la tasa por la recogida de basura, la entrada en vigor de dos nuevos impuestos estatales, recogidos en la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular, obliga a tener que incrementar las tasas. “Uno de esos impuestos es el de los plásticos de un solo uso, que ha tenido mucha repercusión en el ámbito agrícola por los sobrecostes que ha acarreado al sector; y por otro lado está el impuesto sobre el depósito de residuos en vertederos, la incineración y coincineración de residuos”, ha explicado José Francisco Rivera. Se trata de “impuestos de carácter nacional e indirectos, que vienen a ser una especie de ‘IVA de la basura’ y tal como está configurado, es el consorcio de residuos quien tiene que recaudar ese impuesto e ingresarlo en la Agencia Tributaria, y al final quien tiene que soportar este impuesto es el usuario del servicio”. En el caso de El Ejido, este nuevo impuesto supone más de 1,5 millones, y a lo que obliga la Ley es a que repercuta sobre el bolsillo de los contribuyentes.